Si no conoces Santillana del Mar, tiene que ser una parada obligatoria en tu viaje a Cantabria. Esta preciosa localidad te enamorará debido a sus callejuelas de cuento y si no lo sabías, este destino tiene gran valor artístico e histórico. Además, es conocida como la villa de las tres mentiras ya que no es santa, no tiene mar y tampoco es llana.
Recorriendo este encanto de lugar y sus empedradas calles medievales, encontrarás dos Paradores situados en el mismo centro, uno enfrente del otro.
El Parador de Santillana del Mar, está situado cerca de la plaza de esta localidad. Es una casona de estilo cántabro con arquitectura típica de la zona. En el interior podréis disfrutar de una decoración muy acogedora con diferentes espacios como salones que invitan al relax y la lectura.
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El Parador de Santillana Gil-Blas es una casa solariega de los siglos XVII-XVIII. En su interior hallarás diferentes cuadros con motivos de las Cuevas de Altamira y en su restaurante prueba platos típicos de la zona como la quesada pasiega o el cocido montañés.
Reserva en el Parador de Santillana Gil Blas
