La sobriedad tonal y el gusto estético por la materia serán constantes a lo largo de la producción pictórica de Cossío, sin embargo, su estilo evoluciona, depurándose hasta llegar a la abstracción de las formas en obras como “Luz de Santander”, una pieza que rinde homenaje al espíritu y las raíces cántabras que tanto marcaron la vida y obra de Pancho Cossío.
