Parador ubicado en un lugar muy bonito y junto a la naturaleza.
El personal muy agradable excepto una persona de recepción que nos mantuvo una noche sin calefacción, porque no le pareció bien subir la temperatura de consigna, cosa que su compañero al día siguiente sí hizo. El Metre soluciono un problema de espacio en la mesa, en la cena de nochevieja. Resto de personal muy amable.

Bonita ubicación, aunque no hay nada en el pueblo en el que se encuentra. Instalaciones correcta. Muy bueno el billar.

Bonne attention générale mais le dîner du 24 décembre qui devait être exceptionnel a été expedié par la gérante du restaurant qui était pressée de se libérer. Quant au déjeuner du 25 décembre l'attention a été mauvaise.
Le rapport qualité/prix des repas a été globalement décevant, ce qui contraste avec la qualité de l'hébergement et de l'accueil.

Una habitación con poca limpieza, había demasiados insectos tanto vivos como muertos. Tenía un suplemento por buenas vistas, pero una gran palmera no permitía ver apenas nada. Gran decepción!!!!

Nos pusieron en una habitación que da a una tapia de hormigón. En el desayuno nos quisieron cobrar de más con la escusa de no haber enseñado la tarjeta de amigos, cuando nunca, nunca, nos la piden en el comedor, sólo en recepción a la entrada, y no con buenos modos. Llevamos visitados 15 paradores y el peor en el trato y vistas. En la salida, nos quejamos y la recepcionista se disculpó dándonos la razón. Esto fue a primeros de agosto de 2014

Decepcionante la comida. La oferta del menú era muy limitada, la calidad del pescado (merluza) dejaba mucho que desear en cuanto a frescura. El segundo día tuvimos que devolver el plato de dorada, porque estaba reseca y salada El desayuno muy poco variado, con el pan reseco. El personal muy poco amable en general. Si quería que tu habitación no diera a un muro, te cobraban un suplemento de 18 euros. No creo que volvamos.

Estancia decepcionante, habitación con vista a un muro interior y con un bebe en la habitacion de al lado que lloraba, podian haber tenido la consideracion de alojarnos en otra habitación ya que habia muy pocos huespedes alojados

Una Nochevieja regular absolutamente. El Parador es una maravilla, pero la gestion del acontecimiento de salida y entrada de año un horror. Sin preparativos, sin avisar a los invitados, casi nos quedamos en el comedor sin comer las uvas de manera literal, porque no venia nadie a decirnos donde ir. La cena un poco sosa sin nada que destacar ¿donde esta la gastronomia alavesa? No volvemos

Una habitación estupenda y un personal muy amable.

Un lugar estupendo donde desconectar de la ciudad