Bien

Profundamente desilusionados. En esta ocasión llevábamos coche eléctrico y no nos dejaron cargar 20 minutos en un enchufe normal, a pesar de que tenían dos muy cerca... tuvimos que llamar a la grúa y no nos ayudaron ya que "en Madrid no se lo autorizaban" Hemos sido clientes durante más de 20 años.

Sitio precioso, con bonitas puestas de sol. Atención del personal muy justita, salvo restauración y piscina.
No ofrecieron en recepción en ningún momento opciones ni actividades. Las explicaciones cuando pedí información fueron mínimas. Ni un detalle en la habitación, como ponen en otros Paradores, a pesar que no es uno de los baratos. Salvo que cojas una superior, el mar apenas se ve.
Debo haber tenido mala suerte o quizás esperaba demasiado.

Desgraciadamente no pudimos disfrutar como esperábamos de la tranquilidad y el entorno, ya que había una comunión con mucha gente y muchos niños gritando en la zona de la piscina, poniendo música que nos hicieron llevarnos una desilusión del Parador

Pienso que debe ser el Parador el que avise de un evento así previamente a la reserva, cosa que no se hizo. Nos sentimos un poco engañados

Personal laboral correcto y profesional

La piscina muy bien , personal muy amable y eficiente tanto en el bar de la piscina como la persona encargada de la vigilancia y cuidado de las tumbonas. Me decepciono no haber sido informada anteriormente que no estaba abierta la piscina cubierta. Al tener tiempo mediocre nos hubiera gustado disfrutar de ello. Que pena al ser un sitio con una ubicación tan ideal. !

El servicio de cafeteria muy poco profesional y no a la altura de lo que se espera de un parador: carta muy limitada y mediocre, 5 camareros distintos que cada vez preguntan el n° de habitación (5 veces), error en las comandas, un gazpacho de bote a precio exhorbitado (12 euros) , desorganización, igual en el desayuno (20 minutos para servir el cafe; pinzas diminutas para hacer tostadas, que incluso no cumplen con la minima seguridad

Recepción: pésima por una persona en prácticas que se confundió de fecha de reserva - tardamos 40' para hacer el check in - Para el check out, problemas para aceptar la tarjeta American Express - al final tuve que pagar con una VISA . Servicio muy lento en recepción. La habitación limpia y espaciosa, pero con solamente vista al edificio enfrente y con vista al mar muy limitada detras de unos árboles obligando a girar la cabeza.

El peor parador en cuanto a comida en el que he estado, el desayuno muy poco variado, el restaurante con raciones muy escasas, en Huelva no les queda jamón!!! En la cafeteria un plato con el bocadillo sin mas acompañamiento, eso no lo he visto en ningun otro Parador, y ademas la cerveza caliente. En recepcion una persona sola, quince minutos para que te den la llave. El sitio precioso y el personal muy amable, pero no es un parador de 4 estrellas

Muy tranquilo, esta lejos de todo, solo se puede comer en el Parador. Las personas con minusvalia lo tienen dificil, no hay ascensor, acceso a la playa por una escalera inclinada e interminable. La Dirección no me solucionó los problemas de espacio, al ir son 2 niños, a diferencia de los otros 14 Paradores visitados en los que nunca he tenido problemas, sin duda no volveré y no puedo recomendar algo con lo que no me sentí satisfecho.

Este Parador se encuentra en la mejor playa de España, lástima que su personal carezca de profesionalidad y rebosen antipatía y hostilidad hacia el cliente.