Tranquilo

Tranquilo para una escapada de fin de semana en pareja

Parador situado a las afueras de Albacete,a pie de carretera,bien comunicado,tiene una agradable piscina,quizá necesita una reforma y al estar situado al lado de una base aérea el ruido de los cazas del ejercito se nota bastante al despegar y aterrizar,cuando me aloje a las 12 de la noche estaban despegando y aterrizando por lo que es un poco molesto.

Un edificio representativo del campo manchego que combina naturaleza a poca distacia del nucleo urbano. Los desayunos fantásticos, nivel de conservación bueno

Estuve con la promocion de San Valentin y no me convencio,ya que esperaba una buena racion de jamon bueno y nos pusieron dos minitapas de un jamon muy corriente.

Un parador omitible

Lugar agradable, me esperaba mayor amabilidad.

Muy bien para descansar,buena cocina y trato agradable

Al más puro estilo manchego. Lo mejor, sin duda, el personal. Lo peor, la cantidad de mosquitos tigre que había coincidiendo con nuestra estancia.

BUENO EN SU CONJUNTO