¿Sabes cuál es un plan imprescindible que no puedes dejar escapar este otoño? Explorar alguno de los maravillosos bosques que componen el territorio español. En esta época, disfrutarás de un auténtico espectáculo para los sentidos. Es el momento en el que la naturaleza ofrece su mejor cara, en tonos ocres, marrones, rojizos y dorados. Perfecta para disfrutarla en estado puro desde alguno de nuestros Paradores, enmarcados en idílicos entornos. Destinos desde donde emergen las leyendas y la historia. Adéntrate por senderos tapizados de hojas para conectar con la tierra y con uno mismo. Y a tu vuelta, recuerda que te espera una confortable e inolvidable estancia para desconectar y disfrutar de la mejor gastronomía. Te lo mereces.

Si hablamos de paisajes otoñales, Cervera de Pisuerga se lleva la palma. A 10 minutos del Parador, encontrarás el bosque mágico de la Tejeda de Tosande. ¿Y qué lo hace tan especial? Sin duda, sus frondosos tejos y sus 2000 años de vida, que te harán sumergirte en la eternidad. Por unos instantes, sus seis metros de altura y sus robustos troncos te hechizarán y te harán olvidar el reloj. Una atmósfera ataviada con toda la gama otoñal en un paraje que cobija a ciervos, corzos y jabalíes.

Otro de nuestros sitios favoritos es el Roblón de Estalaya. Mucho más fuerte y robusto que cualquier otro roble, esta especie declarada Espécimen Vegetal de Singular Relevancia en Castilla y León, posee una edad que supera los 600 años. Es una visita perfecta y recomendable para toda la familia. Conocerás la majestuosidad de este árbol y la belleza de las hayas de los alrededores, que en esta época lucen su mejor cara.

¿Y lo mejor? El Parador de Cervera de Pisuerga acepta mascotas. Pasear junto a tu perro por estos entornos y descubrir otros lugares imprescindibles como la Ruta del Bosque Fósil o la senda hacia la cascada de Mazobre no tiene precio. Pero si no quieres complicarte, la ubicación de nuestro establecimiento en medio del Parque Natural de Fuentes Carrionas y Fuente Cobre es un excelente paisaje para el disfrute de tu cachorro.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE CERVERA DE PISUERGA

A media hora del Parador de Plasencia, erigido en un impresionante convento del siglo XV, se encuentra el Valle de Ambroz, un imponente bosque que imprime grandiosidad, belleza y cultura. Allí, bajo el nombre de Castaños de Temblar, descubrirás especies arbóreas únicas del territorio español. Cinco ejemplares conforman el paisaje: Hondodero, cuya altura alcanza los 25 metros; Castaño del Arroyo, con una edad aproximada de 800 años; El Bronco, un árbol propio de los cuentos de hadas por su característico tronco en espiral; El Retorcío, cubierto de gruesos paquetes de fibras; y El Menuero, que sobresale por poseer las castañas más menudas del conjunto arbóreo. Ahora es la mejor época para visitar este enclave, por su fotogenia estacional y porque es justo cuando el fruto comienza a brotar.

Así que si eres un apasionado de la fotografía, no olvides traer tu cámara. Además, en el Valle de Ambroz se conserva casi intacto el barrio judío de la villa de Hervás, callejuelas estrechas y empinadas, cuyo origen se remonta al siglo XII, que atesoran tradicionales casas hechas de piedra, madera de castaño y barro cocido. Asimismo, encontrarás los Baños de Montemayor, antiguas termas romanas convertidas hoy en balneario. Y si tienes ganas de más, no te pierdas el Festival de Otoño Mágico del Valle de Ambroz. Con el cambio de estación, los pueblos vecinos organizan jornadas de degustaciones típicas extremeñas, conciertos e instalación de mercados populares. Y, para terminar la velada, te espera el exclusivo bar nocturno, alojado en la bodega del Parador.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE PLASENCIA

El Bosque encantado de Aldán parece sacado de un cuento de hadas, o al menos, eso afirman los visitantes que pasean por allí tranquilamente. Se trata de un paraje atlántico que ofrece en esta estación todo su esplendor y la inspiradora banda sonora que deja a su paso el río Orxás. Robles, castaños, laureles y abedules están repartidos por este majestuoso escenario forestal para transportarte a un mundo imaginario, dominado por el embrujo del castillo de O Frendoal. Residencia de descanso y caza de los condes de Canalejas, que conserva un foso con puente levadizo, el pequeño torreón y una estancia en la parte trasera. Otros conjuntos arquitectónicos que tampoco te puedes perder son el acueducto romano Arco de la Condesa y los bancos de piedra hechos a partir de antiguos sarcófagos.

Próximo al Parador de Baiona, también encontrarás el Bosque de Colón. En 1992, con motivo del 500º aniversario del descubrimiento de América, el gobierno de George Bush envió una legión de ingenieros a la localidad gallega de Poio para proceder a la plantación de 500 ejemplares de secuoyas rojas. Actualmente, puedes deleitarte con esta herencia americana encantadora por sus especies arbóreas de decenas y decenas de metros de altura, con una envidiable esperanza de vida que ronda los 2000 años.

Y si el entorno te gusta, el Parador de Baiona no te dejará indiferente. Con razón, los viajeros de Lonely Planet, lo han catalogado como el rincón más bonito de nuestra marca. Ubicado en la península de Moterreal y con vistas a la bahía de Baiona se encuentra esta antigua fortaleza histórica. Sobresale su escalera de piedra, situada junto al recibidor y su extenso jardín que invita a la tranquilidad, bienestar y desconexión total. El encanto continúa tras las puertas del restaurante, con la deliciosa gastronomía gallega y suculentos platos como el pulpo a la feria, los tradicionales pescados de lonja o las míticas empanadas de la localidad.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE BAIONA

Las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel es un paraíso natural a 15 minutos del Parador de Limpias. Y el otoño es el mejor momento para conocerlo. Solo en esta época se puede apreciar, por un lado, el espectáculo migratorio de aves procedentes del norte de Europa, y por otro, la llegada de especies acuáticas. Descubrirás divertidos animales: somormujos, colimbos, cormoranes, garzas, espátulas, gansos, rálidos, limícolas y gaviotas. Te recomendamos comenzar la ruta por la senda de la Marisma de Solija. A lo largo del itinerario, te darás de bruces con  el Monte Buciero, un entorno en el que puedes encontrar zorros, tejones o ginetas o lagartijas ibéricas. Flora y fauna en su estado natural en este rincón en el que también disfrutarán los más pequeños de la casa.

El Parque Natural de los Collados del Asón brilla en otoño. Es un paisaje kárstico dominado por un conjunto de hayedos y un espectacular bosque caducifolio que esconde una imponente cascada de unos 70 metros de altura. Y para no perderte un solo detalle del entorno, pásate por el Centro de Interpretación y serás informado de otros rincones preciosos que conforman este paraje.

Siguiendo el curso del río Asón, llegarás al Parador de Limpias. La atmósfera otoñal realza la belleza de este alojamiento, emplazado en el Palacio de Eguilior, que en otro tiempo sirvió de residencia de verano a Alfonso XIII. Aprovecha tu estancia para recorrer la hermosura del casco histórico de la localidad y descubre emblemáticos edificios como la iglesia de San Pedro, en la que descansa el Cristo de la Agonía, todo un referente para los limpienses. Asimismo, tienes la oportunidad de sumergirte en la prehistoria adentrándote en las cuevas de Covalanas y Mirón. Por último, queremos recordarte que en nuestro restaurante podrás disfrutar de las delicias gastronómicas cántabras, sin preocuparte por las calorías. Tenemos un magnífico gimnasio y pistas de pádel y tenis para que, ni en vacaciones, renuncies a estar en plena forma.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE LIMPIAS

El Parador de Vic - Sau está rodeado de fabulosos bosques. Uno de ellos es la Fageda d'en Jordà. Este entorno es único. En primer lugar, es un hayedo ubicado a una altitud baja, 550 metros, cifra raramente vista en ejemplos de estas características. En segundo lugar, su asentamiento sobre una colada de lava fría del volcán Croscat convierten al paraje en un atractivo natural y geológico. Además, a mediados de noviembre, se consigue apreciar el máximo esplendor de sus hojas. Si quieres adentrarte en su corazón, podrás elegir entre un amplio repertorio de sendas. Por ejemplo, puedes emprender el recorrido hasta la Granja de Lácteos de la Fageda, enclave donde se elaboran los yogures artesanales de la región. Otra opción es explorar la belleza del Parque Natural de la Zona Volcánica. La Oficina de Turismo te ofrecerá distintos itinerarios para que escojas tu favorito.

Otros de los hayedos que alcanza su máxima grandeza en otoño es la Fageda de los Roques Encantades. A través de mágicos senderos, llegarás a la principal zona de interés: un hábitat adornado con enormes piedras, recubiertas de musgo, que llaman la atención por presentar variedad de formas y tamaños. El paraje es sublime y está a la altura de ser un majestuoso set de rodaje de películas, con el permiso de los bosques de Crepúsculo. Hay una leyenda en torno a este rincón: un demonio descargaba las piedras cuesta abajo hasta estrellarlas con el pueblo vecino de Sant Feliú de Pallerols. Los vecinos, hartos de su mal comportamiento, rogaron a Dios que les echara un cable. Fue entonces cuando uno de sus ángeles bajó a la Tierra para atar las rocas con unas robustas cadenas para que el maquiavélico personaje fuera incapaz de hacerlas rodar. Gracias a esta hazaña, tal vez te encuentres algún duende entre los pasadizos que dibujan los peñascos.

¿Y qué decir del espléndido Parador de Vic? Es un destino perfecto para recargar las pilas, teniendo como telón de fondo la sierra de Les Guilleries y el pantano de Sau. Nuestro programa de Naturaleza para los Sentidos es recomendable para conocer las maravillas que rodean al lugar. Rutas a pie o en 4x4 están recogidas en las experiencias para sacar a relucir todo el potencial que ofrece el paisaje. Tras una jornada de exploración, en el Parador podrás deleitarte con los platos tradicionales de la comarca: coca del Mossèn, habitas a la catalana o butifarra con alubias del Ganxet.

QUIERO RESERVAR EN EL PARADOR DE VIC - SAU